Ernesto Cardenal (Nicaragua)

Ernesto Cardenal (Nicaragua)

 
 

Nació en Nicaragua en 1925. Es poeta, ensayista, militante político, sacerdote y defensor de los derechos humanos. Su obra comienza en 1945 con poetizaciones largas de prosas históricas y escribe sobre el amor a la mujer y la libertad: “Yo he repartido papeletas clandestinas, / gritado: / ¡VIVA LA LIBERTAD! en plena calle / desafiando a los guardias armados.” Merecedor de varios premios internacionales como el Premio de la Paz del Comercio Librero Alemán, el Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda, el premio Reina Sofía y fue nominado al Premio Nobel de Literatura en 2005. Hoy es reconocido como el más destacado defensor de la teología de la liberación en Latinoamérica.

La poesía de Cardenal es una obra de amor donde se funde la historia, la antropología y la religión: “Señor / recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra / con el nombre de Marilyn Monroe / aunque ese no era su verdadero nombre / (pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a los 9 años / y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido / matar / y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje.” Su obra es coloquial y lírica, de versos claros y de gran impacto que demuestran que se puede transformar con éxito las cuestiones políticas en una sustancia poética de calidad.

Conmueve, presenta la indignación con sinceridad y transmite un vigor eficaz en sus versos: “A medianoche una pobre dio a luz a un niño sin techo/ y esa es la esperanza”; presenta la realidad con una claridad casi cruel: “La diversión de unos guardias, hacer correr a la / gente tras los camiones de alimentos, lanzando / de vez en cuando unas cuantas latas al suelo.”

El lenguaje de Ernesto Cardenal, es místico, sus textos unen lo épico con los problemas del pueblo, la intensidad de lo cotidiano, la ironía y la vida moderna. Fuera del mundo hispanohablante, el poeta es conocido gracias a la difusión de su obra en inglés.  Su marca inconfundible, su voz, los temas que le han obsesionado desde su juventud son una celebración de la vida, el amor, el tiempo y la muerte y también un llamado a la comunión, a superar las tinieblas: “Y la certeza de que otro mundo es posible / un Dios no de muertos sino de vivos / la unión de los resucitados el banquete del reino / banquete pan y vino bodas invitados / y un planeta que está de fiesta”.

Rocio Bolanos

 
 
 
 
Salmo 1
 
Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido ni
asiste a sus mítines
ni se sienta a la mesa con los gánsters
ni con los Generales en el Consejo de Guerra
Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano
ni delata a su compañero de colegio
Bienaventurado el hombre que no lee los anuncios comerciales
ni escucha sus radios
ni cree en sus slogans
 
Será como un árbol plantado junto a una fuente.
 
 
 
 
 
 
Epigrama
 
Al perderte yo a ti, tú y yo hemos perdido:
yo, porque tú eras lo que yo más amaba
y tú porque yo era el que te amaba más.
 
Pero de nosotros dos tú pierdes más que yo:
porque yo podré amar a otras como te amaba a ti,
pero a ti nadie te amará como te amaba yo.
 

 
Muchachas que algún día
leaís emocionadas estos versos
y soñéis con un poeta.
Sabed que yo los hice
para una como vosotras
y que fue en vano.
 

 
Esta será mi venganza:
Que un día llegue a tus manos el libro
de un poeta famoso
y leas estas líneas que el autor escribió para ti
y tú no lo sepas.
 

 
Me contaron que estabas enamorada de otro
y entonces me fui a mi cuarto
y escribí ese artículo contra el Gobierno
por el que estoy preso.
 
 
 
 
 
 
En la hamaca sentí que me decías
 
En la hamaca sentí que me decías
no te escogí porque fueras santo
o con madera de futuro santo
santos he tenido demasiados
te escogí para variar.